A lo largo de esta semana tuve la suerte de ver varios momentos interesantes de la vida en nuestras aulas. Pude ver alumnos de diferentes niveles disfrutando clases en distintos momentos. Me atrevo a decir que vi más sonrisas de las que suelo ver, tanto en estudiantes como en docentes. Mis observaciones han sido rápidas, no sistemáticas, pero me entusiasma pensar que esas sonrisas estén respaldadas por un trabajo placentero en las aulas. No es sencillo mantener ese ritmo. Puede ser cansado y por momentos la tentación de apostar por la estabilidad que da el ejercicio tradicional de la autoridad o la gestión de una clase poco democrática y "quieta" puede ser grande. Por eso nuestro principal podría resumirse en lograr que ese placer esté claramente vinculado con aprendizaje y crecimiento de todos.
En las últimas dos semanas he tenido la oportunidad de conversar con directores de universidades y algo que me han subrayado es la urgente necesidad que tienen de recibir chicos que más allá de los aprendizajes enciclopédicos y de estar clavados con las calificaciones, desarrollen habilidades de pensamiento crítico y creativo, que argumenten, que tengan iniciativa, que se apasionen, que sean responsables de los demás, que sepan trabajar con los otros. Justo lo que buscamos. Quizá hablamos tanto de eso en Monclair que no vemos cómo eso se descuida en la mayoría de las escuelas, preocupadas por defender su prestigio o por ganar matrícula haciendo cosas que "se vean padres". Yo creo que si nos centramos en disfrutar del aprendizaje y el desarrollo del pensamiento de orden superior, lo demás sucederá por añadidura.
Hace unos días Víctor (director de Prepa) me compartió una interesante entrevista realizada a César Bona, un docente español que ha sido distinguido por sus propuestas innovadoras. El elemento central de la entrevista está en la importancia de escuchar a los estudiantes. Hablamos de escucha auténtica. Es algo que en Monclair buscamos y no debemos perder de vista. Solo así podremos lograr aprendizajes auténticos. Recomiendo mucho la entrevista. La he puesto en el grupo de Facebook y se las dejo acá también:
Creo que las ideas que plantea Bona articulan muy bien con lo que buscamos y con lo que nos proponía María Acaso. Reforzando eso, comparto también una entrevista del blog Tiching con María hace casi dos años, hablando de devolver el placer a las aulas:
El reto de disfrutar el aprendizaje va estrechamente ligado a otro propósito en el que pronto estaré poniendo mucha énfasis: ayudar a los niños y jóvenes a descubrir sus pasiones y provocar sueños, anhelos, ganas de lograr cosas importantes. Ya iremos hablando sobre qué quiero decir con "cosas importantes".
Algo importante que ya iremos revisando es el sentido y la forma que podría tener la planificación en este contexto, pues no podemos tomar las cosas a la ligera y creer que podemos trascender improvisando.
Por lo pronto, a seguir con entusiasmo transformando, proponiendo... ¡y documentando!
En las últimas dos semanas he tenido la oportunidad de conversar con directores de universidades y algo que me han subrayado es la urgente necesidad que tienen de recibir chicos que más allá de los aprendizajes enciclopédicos y de estar clavados con las calificaciones, desarrollen habilidades de pensamiento crítico y creativo, que argumenten, que tengan iniciativa, que se apasionen, que sean responsables de los demás, que sepan trabajar con los otros. Justo lo que buscamos. Quizá hablamos tanto de eso en Monclair que no vemos cómo eso se descuida en la mayoría de las escuelas, preocupadas por defender su prestigio o por ganar matrícula haciendo cosas que "se vean padres". Yo creo que si nos centramos en disfrutar del aprendizaje y el desarrollo del pensamiento de orden superior, lo demás sucederá por añadidura.
Hace unos días Víctor (director de Prepa) me compartió una interesante entrevista realizada a César Bona, un docente español que ha sido distinguido por sus propuestas innovadoras. El elemento central de la entrevista está en la importancia de escuchar a los estudiantes. Hablamos de escucha auténtica. Es algo que en Monclair buscamos y no debemos perder de vista. Solo así podremos lograr aprendizajes auténticos. Recomiendo mucho la entrevista. La he puesto en el grupo de Facebook y se las dejo acá también:
Creo que las ideas que plantea Bona articulan muy bien con lo que buscamos y con lo que nos proponía María Acaso. Reforzando eso, comparto también una entrevista del blog Tiching con María hace casi dos años, hablando de devolver el placer a las aulas:
El reto de disfrutar el aprendizaje va estrechamente ligado a otro propósito en el que pronto estaré poniendo mucha énfasis: ayudar a los niños y jóvenes a descubrir sus pasiones y provocar sueños, anhelos, ganas de lograr cosas importantes. Ya iremos hablando sobre qué quiero decir con "cosas importantes".
Algo importante que ya iremos revisando es el sentido y la forma que podría tener la planificación en este contexto, pues no podemos tomar las cosas a la ligera y creer que podemos trascender improvisando.
Comentarios
Publicar un comentario